Un equipo con hambre de gloria
Contundente. Inapelable. Sin atenuantes. Paderborn sigue la racha ganadora que tomó en el Verano y parece no tener techo. Este sábado, en cancha 1 de Club Tiro (terreno que le sienta bien, ya que lo vió coronarse en el primer torneo del año), el equipo del sur del conurbano aplastó a TVT en semifinales, haciendo uso de sus armas conocidas: solidez defensiva, mucha entrega en mitad de cancha y contundencia arriba. Luego de 20 minutos parejos llegó el primer golpe con una fórmula conocida. Subida y desborde de Renzo Parrota. Centro medido y cabezazo de Victor Figueroa. Acto seguido llegó la infantil expulsión de Pablo Vazquez, por un insulto al juez, totalmente fuera de lugar. TVT con diez y un gol abajo. Una película repetida: el equipo perdedor, herido en su orgullo, va al frente por la heroica. Se puede lograr el milagro, pero al mínimo descuido puede llegar el knock out. Así fue como comenzado el segundo tiempo llegaron los dos golpes al mentón de TVT, ambos también ejecutados por Victor Figueroa. El nueve de Paderborn parece hecho a medida para estos partidos difíciles. Va a todas, es muy incómodo de marcar y muy inteligente para jugar de espaldas al arco rival. TVT no aflojó en su búsqueda, lo que permitió el lucimiento del arquero de Paderborn, Maxi Ricciutti. El uno de Paderborn estuvo muy seguro en una cancha embarrada y sacó una pelota brillante, volando a su palo derecho, cuando el descuento se venía venir. Menciones especiales para Martín Porcel y Lucas Fernandez, que se comieron la media cancha, y también para “Bigote” Javier Argañaraz en el fondo. Lo de TVT fue dignísimo hasta el final. Hubiera merecido algún gol para decorar el resultado, pero jugó contra un equipo que se agranda en las difíciles.